Llevaba tiempo haciendo balance de su vida y, llegado este momento, cuando apenas había cumplido la década que indica el comienzo de la plenitud, aquella en la que el sosiego y la sensatez sustituyen al vigor físico, entendía que la vida ya no tenía mucho que ofrecerle, aunque en el fondo esto lo había considerado durante toda su trayectoria vital. Nunca se paró a pensar que a la vida hay que regalarle, al menos, lo mismo que se le exige, y en este sentido, su pereza innata y la invasión cada vez más persistente de la rutina, apenas dejaban resquicio para un acto de generosidad. Quedaban lejos, muy lejos, pese a su juventud, aquellos momentos en los que sabía valorar una llamada de teléfono una tarde de domingo, o los bombones que recibía a escondidas por la ventana para endulzar las sacrificadas horas de esfuerzos estudiantiles, o la mirada siempre atenta ante sus frecuentes lamentos adolescentes.
Olvidó que la vida, su vida, algún día fue poesía, que cada hora era un verso, cada semana una estrofa, cada mes un poema, salpicados en cada instante con el brillo de una rima mágica, y en la que el silencio sonaba a música. La cadencia del vivir, su vivir, cambió el paso, y en un momento, -¿en qué momento?-, cada gesto de amor, cada brizna de hierba, cada ráfaga de viento, cada gota de lluvia, esos detalles que tanto disfrutaba cuando el otoño decidía anunciarse, se convirtieron en algo tan prosaico que ni su recuerdo lograba arrancar una sonrisa a aquellos labios tan añejamente inocentes.
El rival de Odyseo
Escrito por odyseo a las 19 de Noviembre 2007 a las 06:37 PM | TrackBackCuándo cambió la vida llena de versos consonates por prosa cáustica. Que se lo pregunten al poeta que leía periódicos.
Escrito por Luis Amezaga a las 19 de Noviembre 2007 a las 08:38 PMPrecioso texto; un poco triste, pero tan frecuente...
Escrito por peke a las 20 de Noviembre 2007 a las 11:43 AMMaestro, me quito el sombrero.
Escrito por odyseo a las 20 de Noviembre 2007 a las 12:02 PMCaptación lúcida y penetrante, poética-prosaica del paso del tiempo existencial desde la atalaya de los últimos años de tránsito hacia la inevitable senectud.Algunos se estan mirando en ello y otros reflejándose lo que les acontecerá.Lo de "añejo"me suena,me.Saluti.
Escrito por giorgiano a las 20 de Noviembre 2007 a las 01:29 PMLUIS: Tal vez cuando se pierde la inocencia, cuando se despierta a la vida o cuando se abre al mundo de la libertad dejemos ese "paraíso" de la inconsciencia en busca del "auténtico", o del auténtico infierno, o simplemente avanzamos hacia el mundo propiamente humano, con todas sus posbilidades, no todas igualmente humanas.
PEKE: Más frecuente de lo que sería deseable es encontrar personas que son incapaces de encontrar el lado amable de la existencia, torpes hasta el punto de convertirse en la "chinita" en el propio zapato de la propia vida, dificultando el camino propio y ajeno.
ODYSEO: "Magister" suena bonito, pero tú y yo sabemos lo que significa y debemos dejarlo para los que más lo merecen. El sombrero mejor me lo quito yo, sobre todo por lo del respeto a la edad, que no a las canas.
GIORGIANO: Querido Giorgiano, "atalaya", "últimos años", "tránsito", "senectud". Para un ensayo daría si fuese capaz de hilvanar los comentarios que me sugieren cada una de tus pensadas palabras.
Aunque llevas recorridos unos cuantos abriles más que nosotros, a mi no me suenas a añejo, más bien me suenas a auténtico, a rebelde, a inconformista. Como ves, características muy propias de la edad que marca tu DNI. Todo un chaval.
Abrazos
Que placer leer esto después de estar fuera un tiempecillo.
Precisamente hoy, que me ha dado por imaginar todo lo que se puede hacer en una hora, y lo poco que hago yo con mí hora
Un saludo Rival
MADI: A mi modesto entender, creo que no se trata de llenar el tiempo con muchas actividades, sino de vivir con intensidad las que en cada momento nos ocupen. Hay personas que consideran que no todo lo que hacemos puede hacer se intensidad, pues la rutina lo impide. Yo desde luego, hasta cuando me aburro pongo todo el empeño.
Escrito por El rival de Odyseo a las 23 de Noviembre 2007 a las 12:03 PMLo siento, el copia y pega no se hizo correctamente en la respuesta anterior, aunque considero que se entiende bien.
Escrito por El rival de Odyseo a las 23 de Noviembre 2007 a las 02:10 PMCuantas veces echamos la culpa al tiempo como para justificarnos ante la vida. A veces decimos ser demasiado jóvenes, otras demasiado viejos, cualquier excusa nos parece buena pero en realidad, ninguna por buena que pueda ser la excusa creo que justifica el acto de sobrevivir, porque eso es lo que yo creo que hacemos cuando lo que hacemos es dejar nuestra inocencia a la deriva con la excusa de que ya no somos niños... dejar de vivir o alejarnos de la vida en soledad, alegando que nadie nos comprende o ponernos a descansar antes de tiempo porque ya lo sabemos todo o no nos quedan fuerzas para desaprender y aprender de nuevo o seguir aprendiendo.
Un poeta siempre será un poeta, solo tiene que volver a hacer versos o disfrutar de la poesía que otros sigan escribiendo.
Me encanta el texto.... me ha regalado pensamientos que me dicen que existen diferentes maneras de marcar la edad en el calendario, una la cronológica con esa no hay nada que hacer, otra la edad biológica con esa podemos hacer verdaderos milagros... ;)
Un fuerte abrazo
Escrito por Brisa a las 24 de Noviembre 2007 a las 01:44 PM