Cuando el cuerpo entero está sano y en forma, salvo una pequeña herida insignificante o una pequeña parte que nos duele, toda nuestra atención se centra en esa zona olvidándose del bienestar del resto. Algo similar sucede cuando toda nuestra vida transcurre de forma plácida y agradable, salvo un pequeño asunto que no sucede según nuestra intención. Fijamos nuestra atención en este asunto olvidándonos de la buena marcha de todo lo demás.
Así, sería de valorar más en la vida el evitar esos pequeños inconvenientes que el buscar los placeres y cosas agradables de la misma. Evitar los males que constituyen la vida es más prudente que perseguir el placer. Como decía Voltaire: Le bonheur n’est qu’un rève, et la douleur est réelle (La dicha es sólo un sueño, lo único real es el dolor). No deberíamos hacer cuenta de las alegrías de que hayamos disfrutado, sino de los males que no hayamos padecido. En consecuencia, el destino más dichoso será el de quien pase la vida sin sufrir grandes dolores, ni físicos ni espirituales, y no el de aquel que participa de los placeres y alegrías más intensos. Uno gana siempre cuando sacrifica placeres a fin de evitarse sufrimientos.
Venimos a la vida con anhelos de gozo y felicidad y con la necia esperanza de satisfacerlos, pero, por lo general, pronto aparece el azar, nos golpea con rudeza y nos enseña que nada es nuestro, sino suyo: nuestros hijos, nuestras posesiones, nuestro trabajo, nuestra salud, nuestra pareja, nuestra familia. La experiencia nos enseña tarde o temprano que el placer es sólo un espejismo en la distancia que desaparece al acercarnos mientras que el dolor no necesita espejos ni símbolos para re-presentarse. En resumidas cuentas, para no acabar siendo realmente desdichado, el mejor camino es el de no pretender ser muy dichoso. Como contaba Merck a su amigo Goethe: "La ruin pretensión de la felicidad, sobre todo de tanta como soñamos, corrompe todo en este mundo. Quien puede librarse de ella y no desea otra cosa que lo que tiene enfrente, puede salir adelante".
Nota: hoy me he levantado con un pie en Aristóteles y otro en Shopenhauer, y con la cabeza en Horacio, mi viejo maestro.
¿Y la cuestión no será redefinir eso que llamamos felicidad de um modo menos materialista? La felicidad está compuesta de muchas más cosas que la búsqueda del placer y la alegría. De hecho, la alegría es consecuencia del hallazgo de la felicidad, aunque esta sea algo tan sencillo como despertarse por la mañana con todos los dedos en sus respectivos lugares.
Escrito por Zirbêth a las 22 de Abril 2005 a las 10:22 AMEsta lección sobre el "arte de vivir", que yo resumo en "no esperar muchas cosas de la propia vida y en aceptarla como viene" para no llevarte muchas decepciones, ¿no deja al individuo como sin tensión, sin nervio, sin ilusión, sin entusiasmo por la misma?
Yo me pregunto: ¿con quién te has acostado anoche para levantarte como te has levantado? Porque te has levantado............................... pletórico, te has levantado ODYSEO.
No sé si estoy muy de acuerdo con tus filosofías, querido. Sentir intensamente es algo impagable; felicidad y placer no son sinónimos; la tibieza será tranquilizadora pero tremendamente aburrida.
Bicos.
Pues con esas me he levantado yo hoy...
Pero prefiero pensar en las posibilidades de felicidad y hasta en inventarmelas. Mil besos Odyseo
ZIRBETH: la alegría no es materialista. Otra cosa es la causa concreta de la alegría que sentimos en cada momento.
MI RIVAL: la tensión no residiría en el individuo sino en la propia vida, que ya se encarga de ponerte las pilas convenientemente. No buscar los placeres no siempre significa rehuirlos.
PEKE: la tibieza o el justo medio? aburridos? Puede, es como vivir narcotizado.
MIRADA: calro, en eso estamos todos o deberíamos estar.
Escrito por odyseo a las 22 de Abril 2005 a las 12:04 PM¡¡Sin Gloria!! ¡¡Sin Honor!! , no hay vida ni sentido. Sin pasión, sin fuego, sin placer ni dolor, ¿quién ha vivido?
Joer, me ha quedado poético.
Escrito por Luis Amézaga a las 22 de Abril 2005 a las 12:12 PMQuerido Odyseo, has tenido un "lapsus" (tú tendrás que adivinar la causa), yo ni siquiera menciono los placeres.¿No será que tienes la mente en los venideros placeres italianos? (¡Pero qué mala es la envidia!)
Escrito por Anonymous a las 22 de Abril 2005 a las 12:20 PMLUIS: no sólo poético, estás barroco, casi del siglo de oro.
MI RIVAL: entendí que venía a colación.... pero sí, habrá ssido un lapsus linguae.... ;-))
Escrito por odyseo a las 22 de Abril 2005 a las 01:12 PMEstoy de acuerdo contigo, Odyseo, el mayor de los placeres es el no haber padecido nunca dolor. El hedonismo como forma de obtener felicidad es comparable a querer hacer funcionar un TGV a base de pilas. La gente actualmente solo busca el mas, mas y mas, el mas de todo. Un ejemplo lo tienes en los deportes de aventura, cada vez mas arriesgados y locos ¿cual es su tope? La vida, o mejor dicho, la muerte. Yo no se, pero dudo mucho que algún preso de Auszwitch durante la 2ª Guerra Mundial cambiase su padecimiento por un polvo, por muy bueno que este fuese. Por cierto... ¿alguien ha visto el nacimiento de un mosquito en directo? Yo, si.Es impresionante. Pero sólo quien sea capaz de ver mas allá de su nariz disfrutará del espectaculo de la belleza de cada detalle de su vida. Al fin y al cabo... memento mori!
Escrito por Ireneu a las 22 de Abril 2005 a las 03:24 PMPues creo que tienes razón, hay mil cosas que se pueden desear, y que por tanto van a hacernos sentir insatisfechos eternamente. Pero si somos positivos y nos fijamos en la suerte que tenemos, por todo lo que ya tenemos, y todo lo malo que no nos ha pasado, podemos sentirnos mejor con nosotros mismos.
Un besito!!!! :)
Ody, no sé si escribirte el comentario o dejar que lo intuyas ;) aunque solo sea por está vez :)
Pero te diré que para que soñar lo que se puede tener solo hay que saber encontrarlo.
Muchos besitos! Te regalo una sensación y te dejo escoger :)
Escrito por Brisa a las 22 de Abril 2005 a las 04:56 PMSerá porque siempre recordamos lo malo y lo bueno lo guardamos en el rincón más escondido.
Hay otra frase muy buena que dice: "El hombre se complace en enumerar sus pesares, pero no enumera sus alegrías".
Dark kisses
Escrito por lua a las 22 de Abril 2005 a las 05:01 PMNo tengo el cuerpo sano, noto a mi alrededor el caos existencial, están locos estos romanos y unas cuantas cosillas mas sin importancia.........pero a pesar de todo me sigo riendo
Doctor Ody tengo remedio? ;)
Interesante post, pero sigo sin tener el día :P, un beso
Ah! la felicidad... esa cosa tan volátil...
Escrito por scape95 a las 22 de Abril 2005 a las 07:49 PMLa felicidad es una emoción, y por lo tanto, por definición, temporal. Yo suelo decir que es un instante, y lo ideal es ser consciente y intentar que emerga de las cosas cotidianas más sencillas. También hay estudios que dicen que somos muy malos pronosticando las espectativas de nuestra felicidad, en el sentido que sobrestimamos que algo nos hará feliz y luego no lo es tanto; a la vez que cuando estamos deprimidos creemos que será para siempre y luego siempre se pasa. Saludos.
Escrito por juanito a las 22 de Abril 2005 a las 11:54 PMYa sé que la alegría no es materialista, pero hay muchos que parecen obtenerla sólo con logros materiales. Están perdidos, creo. Me refería a eso. Muchos besos, Odyseo.
Escrito por Zirbêth a las 23 de Abril 2005 a las 12:03 AMSaludos a todos/as desde Roma. A mi vuelta os contesto a todos
Escrito por odyseo a las 26 de Abril 2005 a las 11:05 AMOdyseo, gracias por todo.
Espero vernos pronto por aqui.
Muchos besitos.
Escrito por Magda a las 26 de Abril 2005 a las 04:14 PMEspero tu vuelta y tus fotos un beso
Escrito por Ligustrum a las 26 de Abril 2005 a las 06:39 PMhola yeni
Escrito por emerson a las 13 de Septiembre 2005 a las 05:24 PM