Con esa frase, el "instante decisivo", se podría resumir toda la teoría y la vida profesional de Henri Cartier-Bresson. Para este gran fotógrafo, la vida era una sucesión de instantes, algunos de los cuales eran dignos de ser plasmados en una fotografía. El fotógrafo debe tener la suerte, la paciencia y el sentido profesional adecuado para saber estar en el sitio y momento justos para captarlo.
Para Cartier-Bresson, fotografiar era como contener el aliento, mientras se unían el ojo, la mente y el corazón para hacer un disparo y captar ese instante decisivo y fugaz. Nunca usó flash, ni filtros, ni trucajes de laboratorio o de retoque ulterior en sus negativos. Su vieja cámara Leyca y su mirada sobre la realidad eran herramientas suficientes. Le desagradaba todo aquello que modificara el punto de vista original y la luz artificial del flash le parecía una falta de respeto hacia el objeto fotografiado.
El viejo maestro se ha ido y nos ha dejado una herencia hermosa, una colección enorme de momentos e instantes decisivos vistos por un ojo sabio como el suyo. Quizás su obra nos pueda servir de ejemplo de honestidad y profesionalidad. Estamos demasiado acostumbrados a ver inifinidad de imágenes, hasta el punto de perder la capacidad de asimilar cada una de ellas detenidamente. Vemos imágenes de horrores aquí y allá. Muchos fotógrafos son maestros en captar víctimas que mueven nuestra caridad, pero a fuerza de ver tantos horrores nos hacemos ciegos para reclamar la justicia que les debemos. Estamos tan inundados de imágenes que ya no sabemos ver la realidad.
Cartier-Bresson captó la vida real allá donde estuvo, sin prisas, sin alterar lo más mínimo esa realidad, sabiendo esperar, pero sabiendo, sobre todo, captar la esencia de cada situación o de cada personaje.
Fue maestro en ver.
En realidad y lamento mi ignorancia, no conocía a Cartier-Bresson, ni su obra, sin embargo a través de tus palabras ha llegado a mí. Gracias.
Creo que un fotografo es como un poeta, como un pintor, capta la realidad a través de su objetivo, y luego la convierte en crueles, tristes, bellas, apasionadas imágenes. Cuanto más sensible, al mundo exterior-interior, mejores fotos hace, la técnica ayuda, pero lo que realmente hace que sus fotos te lleguen al alma es su forma de ver el mundo sobre todo si la compartes, se puede dar empatía o no con un fotógrafo como con un escritor.
A través de las imágenes que ha captado le puedes llegar a conocer. Tús fotos por ejemplo son geniales denotan esa sensibilidad.
Besos de Brisa madrugadora :)
Pues ya estáis viendo algo por ahí de este fotografo, que no tiene desperdicio. Pero os recuerdo que es de los puristas y de la vieja escuela. No encontraréis grandes efectos especiales y trucajes llamativos.
Escrito por odyseo a las 9 de Agosto 2004 a las 01:00 PMBrisa, vuelve con los deberes hechos, he buscado en internet, y por supuesto lo que he encontrado no me ha defraudado, la vida le ha regalado 95 años, supongo que para permitir que él nos regalará su arte. He visto poco, pero me he hecho una idea. Besitos Ody.
Escrito por Brisa a las 9 de Agosto 2004 a las 05:34 PMHola mi estimado Odyseo, te ofrezco una disculpa por no haber venido desde antes a visitarte, pero quería entrar con tiempo para poder escribir con calma y bien, y como el tiempo cuando regresé era escaso pues apenas estoy por aquí.
Estoy trabajando en el post para mostrar las fotos de mis vacaciones, espero tenerlo esta semana.
De Cartier Bresson es uno de los fotógrafos de la vieja escuela pero como dices eso no es limitante para que sus imágenes sean de gran valor pues además del aporte estético también nos deja un legado que a brochazos nos muestra el contexto de su época.
Otro gran fotógrafo que me apasiona es mi compatriota Manuel Álvarez Bravo, quien recientemente falleció dejándonos también una gran cantidad de imágenes de México en la época de la revolución en adelante.
Los fotografos ya no los hacen como antes, es interesante, pareciera que también tiene mucho que ver la realidad que vivimos para inspirarnos en tomar una foto, no lo sé.
Un saludo.
Escrito por Juwe a las 9 de Agosto 2004 a las 06:11 PMasi es hermoso post, yo postie tambien su hida
cariños
Viejo: la cámara de HCB era un Leica, no Leyca, y cuando él comenzó a utilizarla no era nada de vieja, de hecho hasta hoy sigue apareciendo con sofisticado modelos, siempre sigilosas y nobles, cualidades que supo explotar al máximo Cartier-Bresson, así como el formato 35mm, que Leica inaugura.
Saludos
si lo conosco casi como un amigo me acompaña desde hace años cuando comence a tomar fotos del mundo de la vida del ser ... y esta conmigo en cada reportaje a veces me acuerdo de el otras tan solo actuo con su escuela con su manera con sus cocejos no hablados si no hechos de sus obras no se que decir mas siento no haber aprendido tanto de el como deberia un saludo y mucha luz para que continues con tu obra .. donde quiera que estes amigo hemrry C. bresson
Escrito por mauricio a las 12 de Mayo 2007 a las 02:50 PM